El pasado miércoles, entre las 7 y 8 horas, el Sagrario de la iglesia de Nalda (La Asunción de Nuestra Señora) fué profanado.
No siendo suficiente la ofensa, el o los miserables arrojaron las formas por la calle pisoteándolas y formando un reguero hasta la puerta de la vivienda del párroco.
Ha sido este mismo sacerdote, D. Ignacio, quien ha agradecido la respuesta de las autoridades y de los vecinos del municipio ante esta atrocidad. También ha pedido oraciones para desagraviar esta ofensa, informando que en breve se organizará un acto de reparación y desagravio.
Triste anécdota que esta iglesia ya sufrió la barbarie anticatólica hace casi 80 años con su incendio en 1936.